Con la popularización del contenido vía streaming, es natural que muchos se pregunten si la TV abierta corre peligro de extinción.
Para responder a esta cuestión, el presidente del Foro del Sistema Brasileño de TV Digital Terrestre, José Marcelo Amaral, comenta el tema a partir de una visión del sector en Brasil.
"Streaming ya es mayor que la televisión por suscripción". El titular que circula por Internet, además de llamar la atención sobre ese fenómeno de modelo de contenido, despierta la duda sobre el futuro de la televisión abierta. Naturalmente, la pregunta que gira en torno a esta cuestión es: ¿el streaming compite también con la TV abierta en Brasil? ¿Cómo será el consumo de contenido por vídeo en los próximos años?
Vale aclarar, ante todo, que la TV abierta y streaming son servicios complementarios y no compiten entre sí, principalmente porque atienden a públicos distintos. "La televisión abierta tiene un alcance que los servicios por streaming no tienen, ya que depende de una conexión de internet con buena velocidad, lo que buena parte de la población no tiene acceso", explica José Marcelo Amaral, presidente del Foro del Sistema Brasileño de TV Digital Terrestre (Foro SBTVD).
Sin embargo, es cierto que plataformas como Netflix han tomado cada vez más espacio en los hábitos de consumo de los telespectadores. Y la tendencia es que ellos crezcan aún más a partir de la popularización de aparatos inteligentes y por la necesidad actual por productos, servicios y contenidos cada vez más segmentados, como explica el ejecutivo. "Hay una tendencia de segmentación en la oferta de servicios para los consumidores. Así, el mercado se adapta para atender a las demandas específicas. Por ejemplo, hay varias opciones de comida rápida, restaurantes orgánicos, de cocina típica, etc. Esto también ocurre en la búsqueda de contenidos. Quien utiliza el servicio de streaming, busca contenidos segmentados. ", analiza.
Por otro lado, la televisión abierta ofrece un contenido que satisface a la gran mayoría de la población con noticiarios, cobertura de grandes eventos, informaciones urgentes, etc. Es prácticamente imposible que el consumidor quede sin la señal de TV abierta, ya que tiene un sistema de back up para eventuales fallas. Esta tecnología es fundamental para transmisiones en vivo y noticias de última hora.
Para probar que TV abierta y streaming son servicios complementarios, el Foro SBTVD creó el DTV Play, técnicamente conocido como perfil D de Ginga, que permite la integración de contenidos vía broadcast con contenidos vía broadband. "El DTV Play pretende justamente unir los dos mundos para que el espectador tenga una experiencia más contextualizada y fluida", afirma. "En la práctica, el espectador podrá ver un reportaje en la TV y recibir una sugerencia de documental sobre el mismo tema en la plataforma de streaming disponible en su dispositivo inteligente. Así, él podrá migrar / intercalar entre los dos mundos: la programación de la TV abierta y el contenido vía internet ".
Para aquellos que aún no están convencidos de que la TV no corre peligro de extinción (si continúa en evolución) en función del alto costo de producción comparado al streaming, José Marcelo explica que las inversiones para la producción de contenido en ambos pueden ser iguales, pero el costo de distribución de este contenido es infinitamente mayor para la televisión abierta, ya que depende de una estructura robusta para llevar la señal a las localidades más alejadas del país. "La inversión para la televisión abierta es mucho mayor a la hora de la distribución, pues ese contenido llega a la mayoría de la población nacional. En el streaming, quien paga esa cuenta, la mayor parte del tiempo, es el propio consumidor. La televisión abierta ofrece contenido en alta definición sin costo para la población ", finaliza.
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